Miles de personas salieron a las calles de más de 70 ciudades italianas el lunes 22 de septiembre de 2025 para exigir al Ejecutivo de Giorgia Meloni que reconozca al Estado de Palestina en la ONU y que adopte medidas diplomáticas y económicas contra Israel por la ofensiva en Gaza. La jornada incluyó manifestaciones, una huelga general convocada por sindicatos y cortes de vías y autopistas en varias regiones del país.

En Roma, centenares de estudiantes y manifestantes se concentraron en torno a la estación Termini y se movilizaron por las calles del centro; las cifras de la prefectura y de distintos medios hablan de más de 20,000 personas en la capital, mientras que en ciudades como Milán, Turín, Florencia, Nápoles, Bari y Palermo también hubo marchas multitudinarias y alteraciones del servicio de transporte.

Una pauta destacada de la protesta fueron los bloqueos a la actividad portuaria: estibadores y trabajadores portuarios en puertos como Génova y Livorno realizaron paros y sit-ins para impedir el tránsito de mercancías —acciones encaminadas, según los organizadores, a frenar el comercio y el posible paso de material bélico destinado a Israel—. En otras ciudades los manifestantes cortaron autopistas o se sentaron en carriles para impedir el paso de vehículos.

En varios puntos las movilizaciones derivaron en choques con las fuerzas de seguridad: en Milán se registraron enfrentamientos en la zona de la estación central con uso de gases lacrimógenos y en Bologna se bloqueó la autopista A14; las autoridades informaron detenciones y policías lesionados en distintos episodios. Las medidas de orden público provocaron, además, importantes retrasos en trenes y en el transporte urbano a lo largo del país.

La protesta y la huelga fueron impulsadas por sindicatos y colectivos que denunciaron “el genocidio en Gaza” y reclamaron sanciones, embargos y el reconocimiento diplomático de Palestina como Estado. El malestar social se añade a encuestas publicadas recientemente que muestran una preocupación amplia de la opinión pública italiana por la crisis humanitaria en la Franja de Gaza: un sondeo citado por La Stampa y otras cabeceras indica que cerca del 64% de la población considera la situación “gravísima” y que alrededor del 41% apoyaría el reconocimiento del Estado palestino.

El contexto internacional también influyó en la jornada: la protesta en Italia se da en un momento en que varios países europeos han anunciado posiciones de reconocimiento o de mayor presión diplomática sobre Israel, y la movilización busca traducir esa presión en cambios de política por parte del Gobierno italiano, que hasta ahora ha rechazado reconocer formalmente a Palestina y ha mostrado cautela respecto a sanciones amplias.