El presidente libanés Joseph Aoun ha condenado enérgicamente el reciente ataque israelí ocurrido en la periferia sur de Beirut, denunciando esta agresión como una violación a la soberanía de Líbano. En un comunicado contundente, Aoun subrayó que la agresión de Israel no puede ser tolerada y llamó a sus aliados para respaldar la defensa de la soberanía nacional, exigiendo el apoyo internacional para proteger la integridad de Líbano.

Por su parte, el primer ministro libanés Nawaf Salam calificó el ataque como una "violación flagrante" del alto al fuego, destacando que esta acción rompe el compromiso de cese de hostilidades que había sido establecido hace cuatro meses. Salam recordó que la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU, que puso fin a conflictos anteriores, garantizaba el alto al fuego y la paz, por lo que el reciente ataque israelí representa un desprecio a los acuerdos que aseguran la estabilidad y la soberanía de Líbano.

El incidente, que marca el segundo bombardeo israelí contra la capital libanesa en menos de una semana, incrementa la tensión en la región. El ataque israelí ha dejado a la opinión pública y a los actores internacionales con un sentimiento de alarma ante la vulneración de la soberanía de Líbano. Las autoridades libanesas han manifestado su repudio ante esta agresión, enfatizando que cada ataque contra Líbano afecta la estabilidad regional y compromete la soberanía nacional.

El ejército israelí, por su parte, ha justificado el ataque israelí afirmando que se dirigía contra un dirigente de Hezbolá involucrado en la coordinación con agentes de Hamás para planificar un inminente atentado contra civiles israelíes. Sin embargo, el gobierno libanés insiste en que este ataque es una agresión inaceptable que vulnera no solo el alto al fuego, sino también el derecho inalienable de Líbano a mantener su soberanía y seguridad nacional.

En resumen, tanto el presidente Joseph Aoun como el primer ministro Nawaf Salam han dejado claro que Líbano no tolerará ningún ataque israelí que ponga en riesgo la soberanía del país. La defensa de la soberanía y la integridad territorial de Líbano es una prioridad, y se espera que la comunidad internacional brinde el respaldo necesario para enfrentar estas agresiones. Cada ataque de Israel se convierte en un llamado a reforzar la defensa de la soberanía y la estabilidad de Líbano, pilares fundamentales para la paz en la región.