“República en armas”: Maduro amenaza con la lucha armada si Venezuela es agredida
El presidente advierte una respuesta militar masiva ante un despliegue naval de EE.UU; Washington dice que su operación busca combatir al narcotráfico.

2 de septiembre de 2025
Venezuela
Redacción
El presidente Nicolás Maduro advirtió este lunes que, si Venezuela sufre una agresión externa, el país pasaría “al período de lucha armada” y podría declararse “en armas” como respuesta para defender su territorio, su historia y a su pueblo. La declaración se dio en una rueda de prensa internacional en Caracas, en la que el mandatario criticó el reciente despliegue militar estadounidense en el sur del Caribe y lo calificó como una amenaza sin precedentes.
Maduro afirmó que, frente a lo que calificó como “la máxima presión militar”, ordenó la activación y el alistamiento de reservistas y milicianos. Diferentes medios y agencias han consignado cifras sobre ese llamado a la movilización: el mandatario mencionó la preparación de millones de integrantes de la Milicia Nacional Bolivariana como parte de la respuesta estatal.
La tensión se produce en el marco de un reforzamiento de presencia naval estadounidense en la región. Washington ha desplegado buques y otros activos en el Caribe sur en operaciones que, según fuentes oficiales del propio gobierno de Estados Unidos, tienen como objetivo atacar redes del narcotráfico y apoyar maniobras de seguridad regionales. Agencias internacionales han informado sobre el envío de destructores, un submarino de propulsión nuclear y otros medios hacia esas aguas.
En su intervención, Maduro denunció asimismo que buques norteamericanos “apuntan” con misiles hacia Venezuela y comparó la acumulación militar con crisis históricas, al asegurar que la situación constituye “la más grande amenaza” para el continente en décadas. Por su parte, Estados Unidos sostiene que la movilización forma parte de operaciones contra organizaciones criminales dedicadas al tráfico de estupefacientes y niega que tenga intención de llevar a cabo una intervención contra el Estado venezolano.
La escalada retórica llega además tras medidas de presión anteriores: el gobierno de Estados Unidos incrementó la recompensa por información sobre el presidente venezolano, enmarcando a Maduro en acusaciones relacionadas con el narcotráfico, lo que a su vez ha alimentado la desconfianza de Caracas hacia las motivaciones de Washington. En medio de ese clima, Maduro ha acusado a la Casa Blanca de promover una narrativa que justifique presiones militares y políticas contra su gobierno.
La comunidad internacional observa con atención la evolución del conflicto verbal y el movimiento de buques en el Caribe. Voces diplomáticas y algunos gobiernos han pedido mesura para evitar que la confrontación verbal derive en un incidente mayor. Analistas consultados por agencias internacionales advierten que, aunque la retórica es beligerante, un enfrentamiento directo entre Estados Unidos y Venezuela implicaría complejas consecuencias geopolíticas para la región.
Varias afirmaciones de la comparecencia presidencial —como el conteo exacto de misiles o la presencia de un número determinado de buques en posiciones concretas— han sido recogidas por medios y por el propio gobierno venezolano; sin embargo, los detalles operativos sobre ubicaciones, armamento y órdenes de acción suelen ser verificados por fuentes militares y, cuando es posible, por observadores independientes. Por ello, la información oficial y la respuesta de Washington serán clave para despejar dudas en los próximos días.
El episodio se suma a un deterioro prolongado en las relaciones entre Caracas y Washington, marcado por acusaciones cruzadas, sanciones y denuncias sobre redes de narcotráfico. Mientras el gobierno venezolano enfatiza la soberanía y la defensa nacional, Estados Unidos insiste en su objetivo declarado de golpear a organizaciones criminales que operan en la región. La combinación de despliegues militares, recompensas y discursos beligerantes eleva el riesgo de incidentes y obliga a la diplomacia regional a trabajar para reducir tensiones.