El presidente Donald Trump celebra hoy medio año de su segundo mandato con un mensaje de éxitos en materia de política migratoria, aranceles y recortes fiscales, pero el resurgimiento del escándalo Epstein ha empañado las festividades. En redes sociales, Trump destacó aumentos en su respaldo dentro del movimiento MAGA, aunque sus cifras contravienen la presión pública por revelar documentos clave del caso de tráfico sexual del financista Jeffrey Epstein.

Este domingo, el exabogado Alan Dershowitz pidió al Departamento de Justicia (DOJ) liberar más registros del gran jurado sobre Epstein e instó al Gobierno a conceder inmunidad a Ghislaine Maxwell para que aporte testimonio pleno ante el Congreso. Maxwell, sentenciada en 2021 a 20 años de prisión por facilitar los abusos de Epstein, podría convertirse en pieza clave para esclarecer la red de víctimas y clientes si accede a declarar.

Pam Bondi, exfiscal general de Florida y hoy colaboradora del DOJ, solicitó la publicación de las transcripciones del gran jurado, pero el Departamento se retractó en un memorando conjunto con el FBI, asegurando que no existen “listas incriminatorias” ni pruebas de chantaje. Este documento confirmó además la conclusión previa de que Epstein murió por suicidio en 2019, y no por homicidio, aunque muchos simpatizantes de Trump siguen cuestionando esta versión.

En paralelo, la Casa Blanca celebra el primer aniversario de la retirada de Joe Biden de la contienda electoral y la consolidación de Kamala Harris como su compañera de fórmula. Mientras los demócratas realizan una “autopsia” interna, los liberales ya afinan estrategias de cara a las elecciones intermedias y al ciclo de 2028. No obstante, el caso Epstein vuelve a poner en tela de juicio la promesa de transparencia en Washington y el peso de los escándalos personales en la carrera política.