La Secretaría de Gobernación (Segob) informó que, después de una reunión que se prolongó por más de 13 horas con productores agrícolas y transportistas, los grupos que mantuvieron bloqueos durante la semana se comprometieron a levantar de forma inmediata los cierres carreteros en distintos puntos del país.

El acuerdo tiene como objetivo restablecer el libre tránsito de la población y garantizar el paso de los servicios de emergencia, afectados por las protestas que habían paralizado tramos clave de la red carretera nacional.

Tres mesas de trabajo: seguridad, agua y campo

Como parte de la ruta de solución, Gobernación detalló la instalación de tres mesas de trabajo con campesinos y transportistas:

1. Seguridad en carreteras

   • Espacio para atender las preocupaciones sobre violencia, robos y riesgos que enfrentan los transportistas en diversas rutas del país.

2. Ordenamientos legales en materia de agua

3. Mesa destinada a aclarar dudas sobre la normatividad del agua, en un contexto de inconformidad por reformas y reglas que impactan a los productores del campo.

4. Temas del campo y apoyos directos

5. Mecanismo para revisar las problemáticas del sector agrícola, desde costos de producción hasta apoyos gubernamentales, con énfasis en que estos se entreguen directamente en territorio a cada productor, sin intermediarios.

   
   

En un comunicado, Segob reiteró su disposición a dar seguimiento a las demandas del campo y del autotransporte, y a acompañar la entrega de apoyos en los estados donde se concentra la movilización campesina y de transportistas.

De los bloqueos al diálogo

Los bloqueos carreteros, impulsados por organizaciones de productores y agrupaciones de transportistas, se habían mantenido durante varios días como medida de presión para exigir soluciones reales a sus demandas y mejoras en las condiciones de seguridad y operación.

Con el acuerdo alcanzado en Gobernación, las partes pasaron de la confrontación en las carreteras a una agenda formal de negociación, donde las mesas instaladas serán el espacio para definir ajustes, programas y posibles cambios normativos.

El reto ahora será que los compromisos anunciados se traduzcan en resultados concretos para quienes producen, transportan y mueven diariamente alimentos y mercancías en todo el país.