La Secretaría de Marina (Semar), en coordinación con la Fiscalía de Sinaloa, rescató a 28 personas que viajaban a bordo de una embarcación sin rumbo declarado en aguas del Pacífico; según los reportes oficiales, 27 tenían entre 14 y 17 años y una era una joven de 18. El hallazgo ocurrió en la zona cercana al puerto de La Paz, Baja California Sur, y la embarcación se dirigía con destino al puerto de Topolobampo, en el municipio de Ahome, Sinaloa.

Las primeras versiones señalan que los adolescentes provienen de la frontera con el estado de Chiapas; las autoridades sanitarias y equipos médicos revisaron a los rescatados en el puerto y los trasladaron a refugios bajo la tutela del gobierno municipal de Ahome, donde se inició el proceso de identificación para localizar a sus familiares. En paralelo, el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA) acompaña el caso mientras se determina la situación jurídica y la nacionalidad de los jóvenes.

Las fuerzas navales detectaron que la embarcación realizaba maniobras sospechosas y se encontraba en la zona portuaria “sin una dirección definida”; por ello se efectuó la intervención. Hasta el momento las dependencias han informado que no hay detenciones relacionadas con el caso y que la Fiscalía del Estado trabaja coordinadamente con la Fiscalía General de la República para esclarecer por qué los menores estaban a bordo y si existen indicios de trata, traslado ilegal o explotación laboral.

Algunos reportes periodísticos apuntan a hipótesis investigativas —incluida la posible participación de redes de enganche para trabajo en agricultura—, aunque las autoridades han sido cautelosas y han subrayado que se requieren diligencias para confirmar versiones y responsabilidades. Las indagatorias incluirán entrevistas, revisión de documentación y cotejo de identidades para localizar a las familias o tutores.

La intervención reabrió el debate sobre la vulnerabilidad de niñas, niños y adolescentes en rutas de movilidad interna y los riesgos asociados al traslado por mar sin la protección correspondiente. Mientras continúa la investigación, las autoridades informaron que los jóvenes reciben atención médica y psicológica y que se trabaja para garantizar su integridad mientras se define su situación legal y familiar.