top of page

Ataque a turistas en el Himalaya

El peor ataque contra civiles en Jammu y Cachemira sacude al turismo y reaviva la tensión en la convulsa región del valle de Baisaran.

Himalaya

23 de abril de 2025

Manuel Jasso

En un ataque sin precedentes contra el turismo en Jammu y Cachemira, hombres armados asesinaron al menos a 26 personas e hirieron a una decena más en Pahalgam, un destino muy visitado por viajeros de todo el mundo. Este violento suceso constituye la peor masacre contra civiles en años y reaviva el fantasma de la insurgencia en el valle himalayo de Baisaran.


El ataque se desarrolló en una pradera alejada, accesible solo a pie o a caballo, donde los turistas quedaban expuestos sin rutas de escape. Según las primeras investigaciones policiales, la mayoría de las víctimas eran viajeros, entre ellos un ciudadano nepalí y un profesional indio que regresaba de Medio Oriente. El inspector general V. K. Birdi señaló que la planicie del valle de Baisaran se presta a un asalto relámpago, sin cobertura ni vías de evacuación rápida.


Los supervivientes narraron escenas de horror: disparos a corta distancia, riflazos dentro de tiendas de campaña y familias que huían en medio del pánico. Una testigo de Pune relató cómo los atacantes la acusaron de apoyar al primer ministro Modi antes de disparar a los varones de su grupo. En la caótica evacuación, lugareños como Abdul Waheed emplearon sus ponis para trasladar a los heridos por senderos estrechos y angostos, improvisando camillas con ramas y mantas.


El grupo militante autodenominado Frente de Resistencia reivindicó el terrorismo en redes sociales, denunciando un “cambio demográfico” y acusando a los forasteros de desestabilizar Cachemira. Las autoridades indias mantienen la investigación abierta, mientras refuerzan la presencia militar y policial para garantizar la seguridad en la zona.


La reacción oficial no se hizo esperar: el primer ministro Narendra Modi condenó el ataque en su cuenta de X y prometió llevar ante la justicia a los responsables. El ministro del Interior Amit Shah se desplazó inmediatamente a Anantnag para presidir una reunión de crisis con mandos de la Policía y la Marina. El Ejército lanza ya operaciones de búsqueda en las montañas circundantes.


La masacre de Pahalgam ha provocado un éxodo de turistas, reprogramación de vuelos y protestas ciudadanas exigiendo “¡Alto al terrorismo!”. A nivel internacional, Estados Unidos, Pakistán, Rusia y varias potencias mundiales expresaron su condena y solidaridad con las víctimas. La tragedia, sin embargo, arroja preguntas sobre el futuro del turismo en Jammu y Cachemira, una región disputada y golpeada por más de siete décadas de violencia.

Comparte

bottom of page