México toma distancia de China
Presidenta Claudia Sheinbaum firmó decreto para proteger industria textil y Marcelo Ebrard anuncia decomisos de piratería del país asiático.

Ciudad de México, México
19 de diciembre de 2024
Redacción
Este jueves, en La Mañanera del Pueblo, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, firmó un decreto para fortalecer la producción nacional y proteger la industria textil, que atraviesa una de sus peores crisis. Esta medida incrementa temporalmente los aranceles a las mercancías confeccionadas en 35 por ciento y a los textiles en 15 por ciento, buscando reactivar un sector clave para la economía mexicana.
En la misma conferencia de prensa, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, explicó que las nuevas tarifas arancelarias responden a la necesidad de proteger la industria textil local frente a las crecientes importaciones. Las medidas son temporales, pero se espera que fortalezcan el sector.
La industria textil en México abarca desde la fabricación de fibras hasta la producción de ropa, textiles para el hogar y productos técnicos. Este sector también tiene vínculos con otras industrias, como la automotriz, la aeroespacial y la médica, lo que subraya la importancia de las medidas para proteger el empleo en el país.
México depende de importaciones de países como China, Estados Unidos y Vietnam, que en 2023 representaron un valor cercano a los 9 mil millones de dólares en textiles. China, con 4 mil 600 millones de dólares, sigue siendo el principal proveedor, lo que pone en riesgo la competitividad de las fábricas mexicanas.
Combate a la piratería y retórica contra China
Aparte de los aranceles, se han implementado operativos para combatir la piratería. Marcelo Ebrard destacó el decomiso de más de dos millones de piezas de productos pirata, principalmente provenientes de China, como parte de la lucha por defender la industria mexicana.
También, Ebrard aclaró que México no importa autos chinos debido a las reglas de origen que exigen que al menos el 70 por ciento de los vehículos se fabriquen en Norteamérica. Sin embargo, reconoció que el fabricante estadounidense General Motors es uno de los mayores importadores de vehículos chinos, representando alrededor del 40 por ciento.